Magnetismo universal
Los campos magnéticos son fuerzas invisibles que impregnan a las partículas magnéticamente sensibles.
Estos rayos subatómicos se expanden por el espacio impregnando a su paso a estas partículas.
Estos vientos estelares, por lo general, son fruto de la explosión de supernovas. La energía liberada es un fluido dinámico compuesto por plasma.
La mejor manera de entender este proceso es comparándolo con el agua de mar. Corrientes marinas creando túneles de aceleración como si fueran autopistas dentro del mismo agua. Ondas o vientos estelares que se parecen a las olas en la orilla. Impulsos silenciosos y constantes que dan vida magnética al universo, permitiéndonos su estudio y ampliación de conocimientos.
Es muy probable que desde hace miles de años estas corrientes invisibles hayan sido percibidas por personas sensibles. De hecho, los animales sienten determinadas amenazas como terremotos o tsunamis. Algunas culturas han basado la construcción de sus templos e incluso de sus asentamientos en lugares característicos. Espacios que ocuparían un lugar diferente en nuestra corteza terrestre y que hoy son llamadas líneas Ley o Leigh. Se tratan de meridianos o líneas telúricas que rodean el planeta. Se consideran corrientes magnéticas que trazan una línea bajo la corteza terrestre y unen puntos entre sí. Los Mayas, Incas, Egipcios, Guanches y poblaciones de la antigüedad las tenían muy en cuenta a la hora de construir sus templos. Posteriormente, los Templarios y otras ordenes más modernas, han seguido dando especial atención a este tipo de fenómenos magnéticos con el fin de favorecer magnéticamente sus centros ceremoniales, lugares de culto o meditación.
Nosotros estamos ubicados en el camino Estelar de Santiago. Un camino iniciático para muchos y de trascendencia espiritual para la mayoría. En nuestro caso, el estudio se ciñó al cultivo de plantas y manejo de la agricultura. Ciclos favorables de siembra y recolección. Momentos a ser considerados a nivel estelar y, sin duda, una materia de estudio con la que aprender y mejorar nuestro manejo cuando trabajamos en la naturaleza. Somos aprendices en esta apasionante materia de los campos magnéticos. Lo que no nos crea ninguna duda es de su importante influencia en los ritmos de la Tierra y en aquellos que vivimos en ella.
Lo invisible hoy, ya es real.
